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jueves, 14 de abril de 2011

Servicios de atención a la infancia en mi municipiom, Toledo.

Me centraré en mi barrio, Azucaica.
En Azucaica encontramos una ludotecas, un centro cívico y un colegio público, La Candelaria.


Biblioteca:
Dirección: Avda. Azucaica s/n. 45008 Toledo
Teléfono: +34 925229703
Año de fundación: 1994
Fondos: 860 libros 210 publicaciones periódicas 150 folletos 12 CD
Servicios: Préstamo, Catálogo automatizado
Tipo de acceso: Acceso libre
Horario: Lunes-Viernes de 17-19


Colegio público, La Candelaria.

Colegio donde solo se cursa educación infantil y educación primaria. (0-12 años)

http://edu.jccm.es/cp/lacandelaria/index.php?option=com_frontpage&Itemid=1

Cuestionario de Estilos Educativos.


Diana García García

miércoles, 13 de abril de 2011

Mi hija me pide que le lea el mismo cuento una y otra vez...

'Ota vez, ota vez...', eso decía mi pequeña cuando le contaba un cuento o le ponía una canción que le gustaba. Eso pasaba con sus películas infantiles preferidas, con los libros que ella siempre los llevaba debajo del brazo, con las canciones que la hacían bailar hasta caerse al suelo... Al principio, eso de repetir y repetir una y otra vez cada cosita, nos preocupó algo a su padre y a mí, pero con el tiempo nos hemos dado cuenta de que era positivamente estimulante para su lenguaje y vocabulario.


¿A que sabes de lo que estoy hablando? Seguramente a tu hijo le despierta la misma excitación y entusiasmo por escuchar una y otra vez algún cuento o canción que le gusta. Charlando con otras madres, me di cuenta que en sus hogares es algo también muy habitual, especialmente con los hijos más pequeños.

Además de favorecer el lenguaje y fomentar el vocabulario de los niños, la repetición también ejercita su memoria. Me acuerdo que mi hija sabía de memoria muchos diálogos de los cuentos que yo le contaba. Y lo mismo con las películas. Así son los niños, así es como aprenden a decir las primeras palabras o a hablar otro idioma... ¡con repeticiones! Un estudio realizado por la Universidad británica de Sussex revela que repetir una y otra vez el mismo cuento es muy positivo para el aprendizaje de los niños.

La investigación expuso a dos grupos de niños de 3 años al aprendizaje de dos palabras nuevas. Cada una de las nuevas palabras eran palabras inventadas para designar un objeto desconocido. Durante una semana, uno de los grupos de niños escuchó tres historias diferentes con estas palabras y el otro grupo sólo una historia varias veces con las mismas palabras nuevas. Tras la semana, se notó que los niños que habían escuchado sólo un cuento se acordaban mejor de las nuevas palabras que los niños a los que habían escuchado tres historias distintas.

La primera vez que un niño escucha un cuento, se preocupa en comprender la historia; la segunda, percibe los detalles y la descripción, y así sucesivamente. Así que, la próxima vez que tu hijo te pida que le leas un cuento una y otra vez, aunque te parezca algo aburrido, piense en los beneficios que eso representa para su lenguaje.




LEER CUENTOS:

Desde muy pequeños, aún antes de ir al colegio, podemos estimular en el niño el gusto y el hábito por la lectura. Una forma de hacerlo es a través de los cuentos. El niño aunque no sepa leer, puede darse cuenta de lo que las palabras escritas quieren decir.
Cuando un niño oye muchos cuentos desarrolla una fuerte motivación por querer leer. Aprende que la lectura puede ser divertida. Al escuchar un cuento, el niño comienza a interesarse en adquirir habilidades por la lectura y la escritura.
Asimismo, amplía su vocabulario, enriquece su imaginación y creatividad, desarrolla habilidades lingüísticas, aprende a escuchar, comienza a comprender los sentimientos de los demás.
Otra de las ventajas de leerle un cuento al niño, es que estimula sus habilidades de pensamiento, en tanto piensa en las historias que oye, va desarrollando su pensamiento lógico al igual que las nociones de tiempo, por ejemplo : ellos reconocen que la mayoría de los cuentos comienza con; había una vez y termina; como dijo
Periquito fueron felices y comieron perdices.

¿Cómo podemos incentivar el hábito por la lectura en niños pequeños?

Siempre que se presente la ocasión, lee algo a tu niño: antes de dormir, después de comer, mientras espera que esté lista la cena... Permite que tenga la oportunidad de elegir lo que será leído, responde a sus preguntas y comentarios respeto al cuento.


Algunas veces en vez de leer, cuéntale cuentos que te sepas de memoria. Estos pueden ser cuentos tradicionales, leyendas, fábulas, los que le contaron de niño…
Nárrele cualquier cuento que le guste y considere que su pequeño comprenderá y disfrutará. Puedes ayudarte utilizando títeres, figuras, muñequitos, cintas grabadas…
Otra forma de contar cuentos es que el niño cree y narre sus propias historias sobre cosas que haya hecho o imaginado.
Cuando el niño dicta sus cuentos comprende que las palabras habladas pueden ser escritas y leídas. Luego motívalos para que dibuje y coloque éste en el lugar de la casa que él prefiera.
El se sentirá feliz mostrando sus dibujos y cuentos a los demás.
Ten presente que los niños disfrutan de oír cuentos una y otra vez. También es importante leerle los cuentos en voz alta, que vea a sus padres leer. Cuando pases las páginas del cuento, el pequeño descubre que toda historia tiene un comienzo y un final, que se lee de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo, igualmente cómo se forman las palabras y oraciones.
Recuerda, los niños se divierten y aprenden muchos conceptos mientras escuchan un cuento. Pero sobre todo, el tiempo que pasan juntos, permanecerá en él para siempre, como uno de los momentos más felices de su infancia.

Diana García García

martes, 12 de abril de 2011

Periodo de adaptación.



El periodo de adaptación es el proceso por el cual el niño va formando y preparando, desde el punto de vista de los sentimientos, la aceptación de un medio nuevo, la escuela.
Este período y la forma de resolverlo será muy importante en el proceso de socialización del niño y su actitud hacia la escolaridad y el aprendizaje.
La adaptación del niño a la Escuela Infantil supone un gran esfuerzo, ya que debe aceptar la nueva realidad que se le presenta, una realidad que le es totalmente desconocida.
El niño vive con una gran ansiedad el momento de la separación de su familia, es una separación no sólo física, también mental. Se siente menos protegido y seguro, se siente solo, abandonado, con miedo; entender esta vivencia y comprenderla es fundamental para poder valorar la respuesta del niño ante la escuela, sus lloros, su pasividad y su temor son respuestas lógicas ante el nuevo reto que debe afrontar. Los adultos, tanto padres como profesores deben dirigir este proceso para que el niño lo supere sin traumas.
Por tanto, la entrada en la Escuela Infantil supone un cambio importante, implica una salida del medio familiar en el que se encuentra seguro y protegido, en el que además tiene un papel o rol determinado: siendo el pequeño, el mayor, el tranquilo, ...a un medio mucho más amplio que es la escuela, en el que las relaciones son distintas y que para él se presenta como algo desconocido.

Por tanto, se trata de que en este período se adapte fundamentalmente a:

* El espacio: conozca el centro y sus dependencias, el aula y sus materiales.
* Los adultos: distintos de sus padres, abuelos, amigos,...
* La separación de la familia y su aceptación.

Esto implica tiempo y procuraremos adaptarnos a los ritmos personales de cada niño. Es un proceso que cada niño tiene que realizar por sí mismo.
Los niños comienzan la escuela con diferentes grados de madurez social y emocional.
Es importante tener en cuenta de forma concreta a los alumnos con necesidades educativas especiales, que por sus características necesitarán un mayor apoyo y atención que sus compañeros.
Aceptar que debe compartir al adulto, que deja de ser el centro de atención y que debe relacionarse con otros niños y ajustarse a unos cambios espaciales y horarios es un proceso que le hace madurar, pero que al mismo tiempo le puede resultar doloroso.
Es muy importante, por tanto, adoptar una actitud que favorezca y facilite esta adaptación. Los espacios y materiales, los tiempos y las actividades a realizar durante este periodo deberán estar cuidadosamente estudiados para facilitar este proceso en todos y cada uno de los alumnos. La incorporación progresiva de los alumnos en pequeños grupos minimiza el esfuerzo de adaptación en los niños y facilita la tarea del educador.
La adaptación no es sinónimo de llorar o no llorar. Cada niño muestra su adaptación o inadaptación de distintas maneras.



Diana García García.

Información de AUDIREM.

¿Qué es Audirem?



Audirem tiene un objetivo principal, que aprender sea una experiencia agradable para todos.
En Audirem tratan diferentes problemas:
• Problemas de atención, concentración y memoria.
• Mala letra o escritura mal organizada.
• Dificultades para leer.
• Problemas de lenguaje.
• Niños con déficit de atención y/o hiperactivos.

Audirem se encarga de la prevención y tratamientos de problemas de aprendizaje, nos ofrecen charlas informativas para padres y educadores en técnicas de estimulación infantil y asesoran en programas de estimulación para niños con dificultades especiales: Autismo, S. Down, parálisis cerebral…

“Si no entiendo lo que me dices no puedo aprender lo que me quieres enseñar”


Para poder comprender y me memorizar un mensaje auditivo es necesario percibirlo con claridad. Una percepción distorsionada traerá como consecuencia una mayor dificultad para procesar el mensaje, un retraso a la respuesta y un aumento de fatiga. Todo esto dificultará y, en algunos casos, podrá llegar a impedir el aprendizaje.

AUDICIÓN Y APRENDIZAJE:


El oído sirve para la audición, pero también nos indica la postura. Por la postura podemos averiguar la audiometría, por ejemplo:

• La posición de un cantante de ópera es recta.
• Sin embargo, la posición de un cantante de rap es caída, con la pelvis hacia fuera.

Tiene una tercera función que es la de estimulación cerebral. Los sonidos agudos estimulan el cerebro y los sonidos graves adormecen el cerebro
El oído no sólo sirve para escuchar, también sirve para hablar ya que es el que controla la voz. Otra función del oido es la de mantener la postura y el equilibrio. Los niños que no tienen un buen desarrollo de esta capacidad tienen muy mala postura, les cuesta mantenerse erguidos y sentados. Pueden también tener problemas motrices por lo que algunas veces escriben mal. También tiene una función de "dinamo", ayuda a que estemos despiertos y alegres, con ganas de hacer cosas.

> En el funcionamiento del cerebro podemos encontrar dos formas muy importantes de trabajar: Vía sensitiva y vía motora.


Desajustes en la audición y consecuencias (vía sensitiva)

• Audición dolorosa
• Mala discriminación auditiva (rata=lata=pata=mata)
• Remanencia (sigue oyendo el sonido aunque ya no esté sonando)
• Mala lateralidad auditiva (no tiene un oído dominante)
• Mala espacialización (no localiza el sonido)
• Pobre actitud de escucha
• Hipoacusia (sordera)
• Dificultad de enfoque auditivo (no puede concentrarse en un sonido concreto)

Problemas que provocan (vía motora)
• Mala dicción
• Mala pronunciación
• Problemas de lectura en voz alta
• Dificultad para reaccionar a órdenes verbales
• Mala memoria auditiva
• Lentitud de respuesta
• Faltas de ortografía
• Desafinar al cantar
• Hiperaccitividad

> Los profesionales de audición son: el otorrino y el reeducador auditivo. El otorrino trata enfermedades del oído y mide la agudeza auditiva (si el niño padece sordera o no). El reeducador auditivo ayuda al niño a desarrollar la capacidad auditiva, entrenando los músculos de oído medio u ajustando así la audición. El reeducador auditivo trabaja con oídos sanos, cuyo problema es que el cerebro no ha aprendido a utilizarlos de modo equilibrado y desarrollado.

> Los niños con dificultades especiales (autismo, parálisis cerebral, dislexia, hiperactividad...) suelen tener grandes desajustes en la audición. Solucionar el problema auditivo, o mitigarlo, normalmente produce un gran avance en le desarrollo de estos niños. Toda intervención educativa en estos casos debería tener en cuenta este aspecto.




Diana García García.

domingo, 10 de abril de 2011

¿Cómo evitar la triangulación?

Las palabras claves para evitar la triangulación son:
> Primero los hijos y sus necesidades
> Segundo, sentido común.
> Tercero, la relación de pareja se ha roto, pero no la responsabilidad como padres.


Esta lectura muestra como afecta el divorcio no amistoso al desarrollo integral del niño, sobre todo al afectivo, al ser utilizado este, como un simple objeto, dentro de una negociación sin un final, donde cada padre intenta conseguir el máximo del otro, empleando al niño como excusa. (comprando el cariño de este)
Debemos reflexionar, que esto es muy negativo para los niños por que por un lado deben afrontar el alejamiento de uno de los padres, al irse del domicilio familiar, para que encima se les someta a una presión psicológica.
En la mayoría de la veces los niños que se enfrentan a esta situación asumen tareas y actitudes que no le son propias, como por ejemplo de sobreprotección a la madre o al padre , y de rechazo hacía el progenitor que abandona el hogar, puesto que asume que también él ha sido abandonado.
Esto tiene mayor incidencia en el caso de niños, ya que el padre es principalmente quien abandona el hogar, perdiendo el niño el rol a seguir.
Si en nuestro desempeño docente,nos enfrentamos a este problema, debemos hacer ver a los padres, que por el bien de sus hijos, no deben olvidar que como padres, deben dejar de lado sus problemas de pareja, y centrase en el bienestar y desarrollo de sus hijos, manteniendo una relación cordial, y actuar de forma normal, sin que medien acusaciones entre ambos y mucho menos en presencia de los hijos, no intentando ganarse el cariño de sus hijos a base de chantajes, mentiras, haciendo ver que el es mejor, y quien a abandonado el hogar nos los quiere.

Diana García García.